Sura 88 Al-Ghashiyah (El Suceso Sobrecogedor)
- Aprende Islam
- 28 dic 2024
- 20 Min. de lectura
Actualizado: 18 mar
Comentarios de Sheij Khaled Abou El Fadl (USULI INSTITUTE - www.usuli.org)
Corán en español usado: Traducción al español realizada por Abdurrasak Pérez desde la versión en inglés de Muhammad Assad.
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EN EL NOMBRE DE DIOS, EL MÁS MISERICORDIOSO, EL DISPENSADOR DE GRACIA
(1) ¿TE HA LLEGADO la noticia del Suceso Sobrecogedor?
(2) Algunos rostros estarán ese Día abatidos, (3) debatiéndose [bajo el peso del pecado], extenuados [por el miedo], (4) a punto de entrar en un fuego abrasador, (5) se les dará de beber de una fuente hirviente.
(6) No tendrán más comida que el amargo fruto de un espino, (7) que no alimenta ni sacia el hambre.
(8) [Y] algunos rostros estarán ese Día radiantes de felicidad, (9) satisfechos [con el fruto] de su esfuerzo, (10) en un jardín sublime, (11) donde no oirás conversaciones vanas.
(12) Manarán allí multitud de fuentes, (13) [y] habrá lechos [de felicidad] elevados, (14) y copas preparadas, (15) y cojines alineados, (16) y alfombras extendidas....
(17) ¿ES QUE no reparan [quienes niegan la resurrección] en las nubes cargadas de lluvia, [y observan] cómo han sido creadas?
(18) Y en el cielo, ¿cómo ha sido elevado?
(19) Y en las montañas, ¿con qué firmeza han sido erigidas?
(20) Y en la tierra, ¿cómo ha sido extendida?
(21) Exhórtales, pues, [Oh Profeta]; tu tarea es únicamente exhortar: (22) no puedes obligarles [a creer].
(23) Pero, a aquel que dé la espalda, empeñado en negar la verdad, (24) Dios le infligirá el mayor de los castigos [en la Otra Vida]: (25) pues, ciertamente, a Nos han de retornar, (26) y es, realmente, tarea Nuestra ajustarles cuentas.
COMENTARIOS DEL SHEIJ KHALED ABOU EL-FADL
Según la gran mayoría de los reportes esta sura fue revelada en el período medio de La Meca, aunque su estilo se parece bastante a las reveladas en el período más temprano. Fue revelada después de sura Al-Dhariat y antes de sura Al-Kahf, sura Al-Nahl, sura Abraham, y sura Al-Anbiya’, siendo todas estas suras, en muchas formas, complementarias unas con otras, y todas ellas parte de un cambio de paradigma.
Sura Al-Ghashiyah resalta el concepto mismo de la rendición de cuentas, y para ello se ancla en torno a la idea de la unicidad de Dios, y también establece la idea de que la inexistencia de la rendición de cuentas haría que toda la creación perdiera su sentido. De hecho, sin responsabilidad y rendición de cuenta la idea misma de Dios se vuelve problemática. Este es un tema filosófico y teológico, porque la inexistencia del tener responsabilidad y de la rendición de cuenta contraviene el principio mismo de la justicia divina. Creer en un dios que permite que se haga sobre esta tierra cualquier cosa sin que exista algún tipo de consecuencia, sería necesariamente un dios injusto. Solamente es posible la idea de un dios justo con la existencia de la responsabilidad, y por lo tanto con la existencia de la rendición de cuentas.
En el judaísmo emergió la idea de que si tú haces buenas obras recibes la recompensa en esta vida, y si haces malas obras tú recibes el castigo en esta vida, pero esto llega a ser algo muy difícil de justificar empíricamente porque está lleno de gente para las cuales las cosas no funcionan así en esta vida.
Las suras reveladas en la época temprana de la revelación a menudo precisan esto, la existencia de un solo Dios y la existencia de la rendición de cuentas, y que la idea de varias divinidades es un absurdo. Sura Al-Ghashiyah hace precisamente esto, pero además agrega otro elemento que es característico de las suras reveladas en el período medio de La Meca, y que es recordar que el Profeta (BP) no es más que alguien que transmite y recuerda el mensaje de Dios, y que él no tiene el control sobre la creencia de la gente.
Entonces se inicia la sura,
(1) ¿TE HA LLEGADO la noticia del Suceso Sobrecogedor?
Este primer versículo nos presenta una pregunta retórica que tiene como objetivo hacer referencia a un evento importante. Sabemos que el Corán para referirse a la otra vida y al evento del día del juicio final usa distintos términos en lenguaje árabe, como por ejemplo: “Al-Ghashiyah”, “Al-haqqa”, “Al-Dharia”y otros. Todos estos términos son interpretados en los tafsir tradicionales como una referencia al mismo conjunto de eventos asociados al término de esta vida y el comienzo de la siguiente etapa.
Al final de este versículo se usa la palabra árabe “Al-Ghashiyah” para referirse a este evento, y el significado literal es: “un acontecimiento que abruma, y que por su poder y fuerza transforma las cosas”.
¿Por qué decimos que esto se refiere a la otra vida?, bueno, por lo que viene en el versículo siguiente.
(2) Algunos rostros estarán ese Día abatidos, (3) debatiéndose [bajo el peso del pecado], extenuados [por el miedo], (4) a punto de entrar en un fuego abrasador, (5) se les dará de beber de una fuente hirviente.
(6) No tendrán más comida que el amargo fruto de un espino, (7) que no alimenta ni sacia el hambre.
Esta es la apertura de la sura, y en los tafsir tradicionales se indica que estos son algunos aspectos de las características del sufrimiento que algunos seres humanos deberán experimentar en la otra vida.
En muchos de los tafsir de orientación sufí cuando se refieren al suceso sobrecogedor, y como a menudo lo hacen cuando las palabras pueden tener más de un significado, se preguntaron: ¿por qué limitar el “suceso sobrecogedor” a algo que solamente ocurrirá en la otra vida? Esto lo fundamentan indicando que si la Voluntad de Dios era referirse exclusivamente a un evento en la otra vida entonces lo hubiese hecho haciendo uso de un término específico, sin embargo usó esta palabra “Al-Ghashiyah” que se refiere en términos genéricos a un suceso sobrecogedor.
Entonces ellos indican que esta es una invitación de Dios para pensar en ese suceso sobrecogedor que se producirá en la otra vida, pero también en todo suceso que puede tener las características de sobrecogedor y que se puede producir durante nuestra vida terrenal.
Metodológicamente esto tiene sentido, porque cuando el Corán desea usar un lenguaje específico, donde no quiere dejar espacio para negociar la interpretación, simplemente lo hace, mientras que en otras ocasiones usa palabras que pueden tener distintas capas de significado, y en general los estudiosos del Corán han indicado que cuando el Corán hace esto es porque ese es su propósito.
Dado que en este versículo el Corán gramaticalmente usa y hace referencia a una epistemología que es empleada por los seres humanos, los eruditos sufí pensaron que esto era una indicación de que esto tenía un significado más extendido y expansivo. Entonces se preguntaron: ¿a qué más podría referirse Al-Ghashiyah?, ¿a qué podría referirse la pregunta sobre si las noticias o el conocimiento de Al-Ghashiyah han llegado a ti?
La mayoría de los tafsir de orientación sufí hicieron de Al-Ghashiyah también una referencia a la vida misma en esta tierra, la cual podría también ser sobrecogedora.
En los tafsir tradicionales la interpretación de estos versículos es bastante literal y directa, en la otra vida algunos serán castigados.
En los tafsir de orientación sufí, además de la interpretación de que esto representa lo que sucederá en la otra vida, también hacen la interpretación sobre este evento sobrecogedor en la vida terrenal. Entonces el versículo 2 lo interpretan como si te indicara que si tú manejas esta vida terrenal de una cierta manera, entonces tendrías tu rostro deshonrado o abatido, un rostro que se deshonró por la forma en que manejas la vida terrenal.
¿Cuál sería la forma de manejar tu vida terrenal que te llevaría a tener un rostro deshonrado o abatido?
Si tú no entiendes la naturaleza de Al-Ghashiyah, siendo Al-Ghashiyah cualquier evento que te sobrecoja o que te produzca un sobrecogimiento, ya sea que te ocurra en esta vida temporal o en la otra vida, si tú fallas en entender que ese evento para ti es Al-Ghashiyah debido a que perdiste de vista el rol de Dios en dicho evento, entonces tendrás tu rostro deshonrado. Déjenme darles un ejemplo. Primero imagina que estás en una situación de sufrimiento, que estás en un sufrimiento insoportable. Si en esa situación pierdes de vista el hecho de que hay un Dios que quiere ese dolor para ti, y que puede quitártelo, y que en última instancia te recompensará por lo que hagas con ese dolor, entonces ese dolor se vuelve al-ghashiyah para ti, se vuelve algo abrumador para ti, porque te parecerá que es solo dolor, te parecerá que no hay razón para ese dolor, te parecerá que ese dolor no tiene consecuencias más allá de la agonía que sientes, y además sientes que eres impotente ante ese dolor, y que no puedes hacer mucho con él. Entonces, debido a esto la expresión se aplicaría a ti, sería como decir: "bueno, debido a la forma en que has manejado este Ghashiyah, este evento que te generó un dolor abrumador, ahora tu rostro se ha deshonrado, tu rostro está angustiado, está agobiado y triste”.
Veamos ahora el versículo 3 según la tradición sufí. Ahora, ¿cuál sería la forma de manejar tu vida terrenal que te llevaría a estar debatiéndote y extenuado?
Cuando trabajas duro, con energía pero muy nervioso, y con acciones sin sentido ni propósito, ¿qué sucede si en esa condición te enfrentas a eventos abrumadores? Sí, es posible que simplemente te acobardes y metas la cabeza en un agujero en la tierra, es posible. Pero lo que sucede a menudo es que empiezas a ponerte más nervioso, y te ocupas moviéndote de un lado a otro, de un lado a otro, como si estuvieras pasando cosas de un lado a otro, pasando cosas de un lado a otro sin parar, pero completamente sin sentido, sin un propósito. Toda esa energía no te sirve de nada, no te lleva a ninguna parte.
Luego, de hecho, el manejo mismo, o más bien el mal manejo de lo que te abruma, es lo que convierte a la situación anterior en un fuego incesante. Este es el versículo 4.
Así que los eventos en sí mismos, las mismas pruebas en esta vida, no necesitan ser un fuego incesante, pero es tu mal manejo de estos eventos, es decir, tu incapacidad para comprender los eventos por lo que son, lo que te hace entrar en un fuego incesante. Entonces es como el ejemplo del dolor, tienes un dolor agonizante y haces lo que mucha gente hace, empiezas a pensar que es el fin del mundo y dices: "No puedo trabajar, no puedo pensar, no puedo hablar", y empiezas a insultar a la gente y no soportas a nadie, y empiezas a buscar una forma de aliviar el dolor, aunque sea tomando drogas o lo que sea, porque solo quieres que el dolor se detenga. Ese mal manejo de una cosa es lo que la convierte en un fuego incesante.
Luego los tafsir de orientación sufí llegan a los versículos siguientes y se preguntan: ¿Qué convierte lo que bebes, en sentido figurado, en una fuente de agonía y dolor, y lo que consumes en un hundimiento aún mayor en la agonía y el dolor?
Los eruditos sufís indican que la ironía de esta vida terrenal es que precisamente esa energía nerviosa tuya que utilizas mientras trabajas nerviosamente para manejar los eventos abrumadores, es lo que te hunde más en la agonía y el dolor. Pero la ironía mayor de esto es que cuanto más tomas de esta vida para tratar de lidiar con lo que te abruma, cuanto más codicias aspectos de esta vida para tratar de abordar el dolor que estás soportando, peor se vuelve tu dolor.
La tendencia natural es que cuando las personas están abrumadas en esta vida piensan: "bueno, si bebo más, si consumo más, estaré bien", o "si obtengo más de esta vida me arreglaré, estaré bien”. Pero de hecho nunca sucede de esa manera, y cuanto más lo codicias y más consumes, peor se vuelve tu condición.
Hay dentro de la tradición sufí aproximaciones con variaciones sobre este tema, como por ejemplo la de algunos como Kashani. En primer lugar, cuando Dios en el versículo 3 menciona que están agobiados y trabajando duro, ellos se preguntan, ¿A qué tipo de trabajo se refiere? La respuesta es en cuanto al más allá, a la otra vida. Según ellos cuando Dios te habla y te dice que trabajarás, dice que trabajarás, pero esta vez trabajarás en acciones o actividades relacionadas con lo que has hecho, con tus malas acciones en la tierra. En otras palabras, trabajarás, pero no se trata de un trabajo cualquiera, sino de un trabajo que estás obligado a hacer para reparar todo lo malo que has hecho en la tierra.
En segundo lugar, en esta aproximación entienden que el versículo 4 está indicando que no existe un fuego peor que el fuego de la ignorancia, y que el fuego asociado a la pérdida de comprensión de que deberás ver la verdad de quién eres y de lo que has hecho, y que deberás abordar lo que has hecho.
Luego, en base al versículo 5, entienden que en la otra vida la referencia a beber agua hirviendo es que, quienes estén en esa situación, tendrán que beber forzadamente el agua de su ignorancia. Es como la confrontación de su propia oscuridad.
Posteriormente llega el versículo asociado al alimento, y entienden que aquellos que estén en esta situación, se verán forzados a consumir la verdadera y dolorosa realidad de la oscuridad de sus intelectos y corazones.
Entonces esta interpretación le da un significado a estos versículos pero asociados a la otra vida, indicando que dada la ignorancia con la cual viviste tu vida terrenal deberás confrontar la cruda verdad de todas las cosas. En tú vida en la tierra puedes engañarte a ti mismo, puedes decir: “Bueno, yo no soy una mala persona. En realidad, no soy una mala persona porque a la gente que odio en realidad merece ser odiada. No soy una mala persona, porque a la gente que lastimé merecía que la lastimara”, pero en el más allá todos esos autoengaños desaparecerán y verás las cosas en su cruda verdad, y verás el hecho de que en realidad estás lejos de Dios y del reino de la luz. El problema que tienes es que ahora no te das cuenta, pero en el más allá el ser etéreo que eres sufrirá profundamente cuando se enfrente a estas realidades etéreas. Eso se convertirá en tu verdadero fuego, porque la ignorancia te desgarrará de la misma manera que la luz y el conocimiento te consolidan. Así que ese fuego no será necesariamente un fuego desgarrador que tiene una cierta temperatura, sino que la ignorancia en sí misma será un fuego que literalmente te desgarrará.
En el tafsir atribuido a Ibn Arabi, él presenta una interpretación de estos versículos desde una perspectiva lingüística, mientras que en su futuha presenta estos versículos desde la perspectiva de las visiones que él tuvo.
Entonces vemos una dualidad de interpretaciones en la tradición sufí, ¿cuál es esa dualidad?
Nosotros dijimos que Al-Ghashiyah es cualquier conjunto de eventos sobrecogedores en los cuales tú no entiendes apropiadamente el rol de la divinidad.
En la primera interpretación sufí se dice básicamente que la sura indica que intentarás resolver tus problemas consumiendo y que el consumo no te servirá de nada, pero que escaparás de tu dolor codiciando más de lo que la vida material tiene para ofrecer, pero lo que codicias de hecho será la fuente de tu tormento.
En la segunda interpretación sufí se indica que el tema que estás bebiendo y comiendo no hace referencia a tu obsesión por las cosas materiales y el consumismo, sino que es tu adicción al pensamiento equivocado debido a tu ignorancia. Entonces en este caso la interpretación de los versículo 5 y 6 son las formas de pensamiento que no son constructivas, y de hecho son en realidad dañinas. Entonces cuando Dios se refiere a Al-Ghashiyah, te estaría alertando en primer lugar de que si te llega un evento de este tipo en tu vida, un evento que te sobrecoge, y si no tienes la perspectiva correcta sobre dicho evento en términos de la vida en esta tierra, entonces serás destrozado por tus emociones e ideas dañinas debido a tu ignorancia. Mientras que en el más allá, cuando veas la verdad de tu oscuridad, esas emociones e ideas dañinas se convertirán en fuego, y ese fuego será como algo que te desgarre.
Ahora, el contraste de todo esto es presentado en las siguientes suras,
(8) [Y] algunos rostros estarán ese Día radiantes de felicidad, (9) satisfechos [con el fruto] de su esfuerzo, (10) en un jardín sublime, (11) donde no oirás conversaciones vanas.
(12) Manarán allí multitud de fuentes, (13) [y] habrá lechos [de felicidad] elevados, (14) y copas preparadas, (15) y cojines alineados, (16) y alfombras extendidas....
En los tafsir tradicionales la interpretación es bastante literal y directa, en la otra vida habrá comodidad, confort y tranquilidad.
En los tafsir de orientación sufí existen interpretaciones no literales.
el versículo 10 que habla de un jardín sublime, lo interpretan como cualquier estado de dicha, es decir, cualquier estado de dicha se considera un paraíso.
Con relación al versículo 11 que dice: “donde no oirás conversaciones vanas”, se ha generado una interesante discusión.
En los tafsir tradicionales indican que este versículo se refiere a que en el paraíso nadie hablará mal de nadie, todas las personas allí tendrán sus corazones reconciliados con los otros, no habrá odio, no habrá enemistad, no habrá celos, no habrá rencor. Pero con respecto a esta interpretación se genera un tema interesante, porque si la gente en el paraíso no tiene odio, no tiene rencor, no tiene celos, ¿siguen siendo ellos el mismo tipo de ser? La pregunta surge porque el odio, el rencor, los celos, son todos parte de la capacidad de tener libre albedrío, y si entonces al ser humano le quitas el libre albedrío, ¿los seres humanos siguen siendo seres humanos?
Debido a esto, al menos los tafsir escritos por aquellos con una orientación más racionalista, reflexionaron sobre este versículo y tuvieron largas discusiones. Entonces ellos indicaron que este versículo no se refiere a lo mencionado por los tafsir tradicionales en cuanto a que en el paraíso no se escucharán habladurías, sino que se refiere a que en el paraíso no existirán engaños asociados al poder y a la autoridad. Las ideas engañosas no circularán desde fuentes que tendrían el poder de hacer circular esas ideas engañosas, en otras palabras, se vivirá en un mundo de honestidad.
Los tafsir de orientación sufí dicen que el versículo se refiere a que Dios sacará del ser humano su capacidad de engañarse a sí mismo. Entonces, dado que Dios sacará a satanás de la ecuación, dado que ÉL sacará lo demoniaco de la ecuación del ser humano, que no es lo mismo que sacar la capacidad de libre albedrío del ser humano, entonces cualquier cosa que los seres humanos sientan que no es saludable se volverá algo muy simple de resolver, y se abordará rápidamente en forma de comunidades de consejos angelicales. Entonces cada ser humano se enfrentará rápidamente a cualquier error sin que la gente se enoje por ello, porque ya no existirán los tipos de cosas que hacen que la gente se enoje, porque por ejemplo no existirá la escasez de algo, o la competencia entre las personas, porque satanás ya no tendrá algún rol allí.
Los tafsir de orientación sufí, con relación al versículo 12 que dice: “Manarán allí multitud de fuentes”, indican que se refiere a fuentes de conocimiento. Es la consecución de la verdad luminosa lo que te eleva, y lo que te limpia.
Los tafsir de orientación sufí, con relación a los versículos 13, 14, 15 y 16, indican que ya sea en esta tierra o en el más allá, la forma en que manejas un evento sobrecogedor en esta tierra siempre tiene niveles de elevación. Los niveles de elevación están íntimamente interconectados con el grado en que has internalizado los atributos divinos, cuanto más hayas internalizado los atributos divinos, mayor será el logro en el manejo de dicho evento sobrecogedor.
Entonces digamos, solo hipotéticamente, que has trabajado muy duro en 10 de los atributos divinos y los has dominado, entonces digamos, discutiblemente, solo por el bien del argumento, que tú eres “latif”, y entonces te has convertido en un ser humano muy amable, y que tú eres “uadud”, y entonces te has convertido en un ser humano muy amoroso, y que eres “sabur”, y entonces te has convertido en un ser humano muy paciente, y así sucesivamente. Bueno, eso significa que la forma en que manejarás un evento sobrecogedor estará en un cierto nivel que será mucho más elevado que la de alguien que no ha alcanzado ninguno de los atributos divinos. Pero si alguien ha alcanzado 20 de los atributos divinos en lugar de los 10, la forma en que se relacionará con un evento sobrecogedor será aún más elevada. Ahora, todos ellos verán que lo mismo sucede en el más allá. En el más allá, tu capacidad, lo que te elevará, lo que te brindará verdadero placer, verdadera felicidad, será la verdad, y la verdad es Dios. Entonces, cuanto más hayas alcanzado de los atributos divinos mayor será tu capacidad de ser elevado en el más allá.
Hay un aspecto fascinante en esto. Lo que logras en tu vida terrenal lo logras y luego mueres, y después resucitas con lo que has logrado, pero ese no será el final de tu viaje. En el más allá continuarás trabajando para alcanzar un nivel cada vez más elevado. Así que algunas personas en el más allá trabajarán muy duro, pero para hacer eso necesitarán su libre albedrío, ¿lo ves?, es por eso por lo que la cuestión del libre albedrío importó mucho para los sufíes. También importó mucho para los racionalistas, pero por razones muy diferentes.
Los sufíes quieren decir que tendrás la capacidad de continuar trabajando, y de hecho ascendiendo en el logro de lo divino en el más allá. Dependerá de ti, incluso dicen que algunas personas lograrán lo que quieran lograr en 100.000 años, a algunas personas les llevará 10.000 años, y a otras personas les llevará lo que sea. Entonces, las personas alcanzarán diferentes niveles, y algunas personas podrían no querer hacerlo, quiero decir que, en última instancia, habrá personas que estén satisfechas con el estado en el que se encuentran, y ahí es donde desearán estar y parar.
Entonces la forma en que ellos entienden los versos: “(13) [y] habrá lechos [de felicidad] elevados, (14) y copas preparadas, (15) y cojines alineados, (16) y alfombras extendidas....”, son como alusiones a características de los niveles morales o éticos.
Sigue la sura y nos deja en un punto en el cual Dios nos dice que debemos reflexionar,
(17) ¿ES QUE no reparan [quienes niegan la resurrección] en las nubes cargadas de lluvia, [y observan] cómo han sido creadas?
(18) Y en el cielo, ¿cómo ha sido elevado?
(19) Y en las montañas, ¿con qué firmeza han sido erigidas?
(20) Y en la tierra, ¿cómo ha sido extendida?
Entonces Dios te llama a reflexionar sobre la creación de las nubes cargadas con lluvias, sobre el cielo, las montañas y la tierra.
Con relación al versículo 17 algunas interpretaciones hablan de camellos que llevan cargas en lugar de nubes cargadas de lluvia, y eso es porque la expresión en árabe puede tener ambos significados.
En los tafsir de orientación sufí es fascinante lo que mencionan en cuanto a que lo que se puede interpretar como “camellos cargados” o “nubes cargadas”, también se puede interpretar como “cualquier ser sin el intelecto”. Entonces ellos a menudo leen este versículo como una referencia a la materia prima de la conciencia humana sin el intelecto y sin el alma. Es como si el versículo 17 dijera: “¿No reflexionas sobre la conciencia misma?”.
Luego recuerden que en la tradición sufí toda referencia al cielo es siempre entendida como una referencia al alma humana. Entonces ellos entienden el versículo 18 como una referencia al hecho de que la consciencia ha sido emparejada con un alma, y este es un secreto que nadie puede llegar a comprender.
Con relación al versículo 19, la palabra árabe que se interpreta como “montaña” también se puede interpretar como “la fuente de poder de cualquier cosa”, y entonces los tafsir sufí han entendido esto frecuentemente como los corazones de los seres humanos, o algunos otros lo han entendido como los intelectos de los seres humanos.
Finalmente el versículo 20 lo entienden metafóricamente como una referencia al cuerpo del ser humano.
Entonces todos estos versículos lo entienden como un llamado de Dios para reflexionar sobre la consciencia, sobre el alma que anima esa consciencia, y sobre los intelectos que logran que las personas se muevan desde sus sensaciones hacia un significado real, y esto en el contexto que les otorga un cuerpo.
Luego de llamar a esta reflexión, Dios dice,
(21) Exhórtales, pues, [Oh Profeta]; tu tarea es únicamente exhortar: (22) no puedes obligarles [a creer].
Dios le dice al Profeta (BP) que él le indique a la gente que su rol es recordarles a ellos sobre este mensaje, y que su rol no es controlar a la gente. (Con relación al versículo 22 la traducción en uso interpreta que la prohibición de obligar que le hace Dios al Profeta (BP) está asociada a la creencia, sin embargo esa es una interpretación, el texto en árabe solo indica: “no puedes obligarles”. Esto es importante dada la explicación que da Sheij Abou El Fadl sobre estos versículos).
Los tafsir tradicionales leen estos versículos en el sentido que Dios le habla al Profeta (BP), mientras que los tafsir de orientación más racional o filosófica, como también los de orientación sufí, entienden estos versículos como dirigidos a cualquier persona que esté realizando el rol que el Profeta (BP) realizó en cuanto a la promoción de una causa moral. Tu trabajo es recordar, no controlar.
En los tafsir tradicionales tienen la típica discusión sobre la abrogación, y muchos de ellos indican que estos versículos fueron abrogados después de la revelación del versículo asociado a la jihad. Con relación a esto, eruditos como Razi y varios otros, dijeron que el pensar de esta forma era bastante miope, porque la jihad en el sentido de un enfrentamiento militar es necesaria cuando existen una serie de circunstancias, y más específicamente cuando un enemigo está listo para usar la fuerza contra ti cuando a él le plazca, y entonces en algunas circunstancias se hace necesario comunicar esto a tu enemigo de forma previa, y eso es lo que hacen los imperios todo el tiempo, avisan que usar la violencia contra ellos sería algo muy costoso. Pero esto nunca puede cambiar la regla ética básica que la única manera de promover la moralidad es enseñarla, la coerción no la establece.
Si los tafsir de orientación sufí están en lo correcto, en cuanto a que las personas confrontarán la verdad de la oscuridad del mal que ellas realizaron, y en mi opinión están en lo correcto, y que las personas logran niveles de iluminación que constituirán sus niveles de dicha en la otra vida, nada de esto es posible en el marco de la coerción.
Recuerden lo que dijimos al principio de la sura, primero que existe un Dios, y luego que para lograr ser una persona con moral debe existir la responsabilidad y el enfrentar las consecuencias, pero acá está la cuestión, para que la rendición de cuentas sea moral se necesita que haya existido voluntad.
La rendición de cuentas no tiene sentido moral si es que hay coerción.
Como esta sura es corta me voy a extender y les diré lo siguiente.
Si quisiéramos formar un estado islámico podríamos decir: “La mayoría de esta población es musulmana, queremos crear algo que dé expresión a nuestra identidad musulmana básica, así que vamos a crear un estado que tenga valores musulmanes básicos, siempre y cuando la voluntad de elegir sea la filosofía fundamental, así que no forzaremos a la gente afirmando que sabemos lo que es divino y cuál es la voluntad divina. Sea cual sea el consenso que hayamos alcanzado, es nuestro consenso como seres humanos, pero no es que digamos que hablamos en nombre de Dios.”
Para que esta declaración sea realmente efectiva, debe ser un consenso minimalista, es decir, que no quite espacio disponible para la libertad humana de las personas, porque cuanto más coercitiva sea la fórmula que logren, más se alejarán del ideal divino.
Así qué, si están tratando de construir algo islámico, es mejor que intenten asegurarse de que sea lo menos coercitivo posible. Por lo tanto debe ser tan coercitivo como sea necesario para mantener un estado de derecho, o tan coercitivo como sea necesario para mantener una identidad islámica básica, pero deben tener cuidado con el establecimiento de los límites de ello, porque cada vez que se involucren en el paradigma de lo coercitivo deben saber que están quitando algo del reino divino.
Este principio, contenido en esta sura revelada en La Meca, es un principio fundacional. Si Dios no le dio autorización al Profeta (BP) para controlar a la gente, ¿entonces que ser humano puede tener derecho a controlar a otros seres humanos?
Me gustaría que los musulmanes de hoy en día reflexionaran sobre esto, sobre todo aquellos musulmanes que indican que no hay problema con los gobiernos autoritarios y despóticos, aquellos musulmanes que indican que el islam no tiene ningún problema con los regímenes de este tipo.
Si al Profeta (BP), ¡Al Profeta (BP)!, no le fue dado permiso para controlar a la gente, entonces ¿Quién se puede atrever a decir: “Yo tengo derecho a controlar a la gente”?
Alguien como Muhammad bin Salman, ¿controla al pueblo saudí o no?, obviamente que los controla. Alguien como Sisi en Egipto, ¿controla al pueblo egipcio o no?, obviamente que los controla.
Realmente me deja sin palabras que muchos musulmanes digan que no hay problema con el paradigma del despotismo que se basa en la idea que una persona, o un grupo de personas, controla a toda una sociedad. ¡Pero si Dios le dijo al Profeta (BP), siendo que él fue asistido con una revelación directa, “tú no tienes derecho a controlar a la gente”! Entonces, ¿cómo puede haber personas que se sienten con el derecho de hacerlo?
Todos los teólogos de jelly islam, matjalí islam, uahabi islam, sufi islam, y de todos otros grupos que andan por ahí, ninguno responde ni habla sobre este punto, ninguno lo aborda. Miren y observen cuántos países islámicos viven bajo despotismos, realmente deberían quedar desconcertados, ¿acaso no ha sido el Corán revelado? En la Biblia se dice que tú debes obedecer a tu rey como obedeces a Dios, pero en el Corán se dice exactamente lo opuesto.
Toda persona que se reclame el derecho de controlar a otras personas está actuando en directa contravención de lo que Dios estableció en el Corán.
Ahora los versículos finales,
(23) Pero, a aquel que dé la espalda, empeñado en negar la verdad, (24) Dios le infligirá el mayor de los castigos [en la Otra Vida]: (25) pues, ciertamente, a Nos han de retornar, (26) y es, realmente, tarea Nuestra ajustarles cuentas.
El Profeta (BP) tiene la obligación de recordarle a la gente este mensaje divino, pero a aquellos que no quieren escuchar y le den la espalda, Dios le indica al Profeta (BP) que a esos no tiene la obligación de recordarles SU mensaje. Esto porque quien da la espalda al mensaje no quiere escuchar, y si no quiere escuchar, entonces el Profeta (BP) no tiene la obligación de recordarle el mensaje.
Finalmente será Dios quien se hará cargo de ellos, y quien les infligirá el correspondiente castigo, porque finalmente ellos deberán retornar a Dios y deberán rendir cuentas.
Gracias a Dios el Señor de los universos, eso es sura Al-Ghashiyah
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